Reflexiones de un curso contingente y muy necesario.

La verdad es que estoy muy satisfecha con los contenidos, la didáctica trasversal (nos habéis hecho aprender bastantes herramientas de comunicación actuales, no sólo estudiar) y, aunque me ha costado un poco por tiempo, la exigencia de actitud autocrítica y trabajo de investigación para los retos. En resumidas cuentas, compromiso verdadero de aprendizaje y cambio.

Al igual que con el efecto “gafas moradas”, ahora ya estamos al corriente de la cotidianeidad de muchas de las discriminaciones que operan en nuestra sociedad y aunque sea poco a poco, debemos aplicar cada día las modificaciones necesarias en nuestra conducta que nos conduzcan o acerquen lo máximo posible a una equidad social integral.

Tener en cuenta que igualdad y equidad no son lo mismo. El contexto y las circunstancias importan y han de ser tenidos en cuenta.

Creo que el concepto igualdad si debe ser aplicado en el trato educado y respetuoso, aunque considero que el objetivo a medio y largo plazo debe ser la equidad integral.

Este concepto de equidad integral es difícil de alcanzar, dadas las barreras existentes a nivel social y económicamente, como hemos repasado a lo largo del curso, pero es nuestro deber, como servidores públicos, practicar con el ejemplo, y aunque mayoritariamente, hoy por hoy, es un trabajo de formación y concienciación individual, creo que hay que sembrar, y si la semilla somos nosotras y nuestras acciones cotidianas, pues ahora toca poner en práctica lo aprendido.

Una cosa es saber y otra acuerpar y actuar en consecuencia.

Lo primero, tratar a todas las personas con educación y respeto. A ser posible conforme a sus necesidades.

-      Tratamiento de usted, o de tú respetuoso, y, ante la duda, no pasa nada por preguntar a la persona cómo dirigirse a ella. Probablemente preguntar ¿Cómo te llamas? Y hablarle por su nombre de forma clara y respetuosa será adecuado.

-      Nos toca informarnos y actualizar nuestros conocimientos básicos en culturas y lenguas distintas a nuestra lengua nativa si un amplio sector que atendemos no puede comunicarse bien en ella. Es nuestro deber exigir esa formación del departamento, o la contratación de técnicas/os de mediación intercultural de apoyo, para alcanzar un servicio adecuado, otra vez la palabra, equitativo. De paso aprendemos también lo que es la negociación laboral para unas buenas condiciones de trabajo y servicio.

-      Igualmente, si el sector de población que atendemos se ve limitado por barreras de movilidad arquitectónicas, cognitivas, auditivas y visuales es nuestro deber comunicárselo a las estructuras de dirección para, adaptar el acceso al servicio, la comunicación verbal, pictogramas, herramientas de lectura fácil, formación específica del servicio en lengua de signos, uso del braille y audioguías  o apoyo de técnicas/os especializados que faciliten esa comunicación y poder ofrecer un servicio, anda, otra vez, equitativo.

-      La parte para mí, más difícil, es la siembra de concienciación entre compañeros/as y familiares con poca o nula disposición a compartir, entender o respetar la diversidad en todos los sentidos. Aquí, en lo laboral, la estructura jerárquica y sus directrices tienen que ordenar el cumplimiento de las leyes, no queda otra.  En lo familiar, me toca un currazo de búsqueda de información y argumentaciones sólidas irrefutables que corten de base cualquier discurso tendente a la discriminación, si no el odio, o establecer distanciamientos de seguridad. No sé, este es un melón muy importante y difícil de gestionar.

Como habéis aportado un montón de recursos, creo que podré encontrar en ellos algunas herramientas de ayuda.

Muchas gracias por el soberbio trabajo de datos, documentación y compromiso que nos habéis dado. Un curso verdaderamente útil y muy, muy, muy necesario. GRACIAS.